«Un dulce navideño hecho película» «una maravillosa adaptación de 'La lección de August».... con frases como esas se refieren otros críticos de cine a esta película que para mí estuvo bien y me pareció interesante.
August es el protagonista, un niño de 10 años, que nace con una serie de deformidades físicas... y tras 27 operaciones recupera el oído, la vista, pero aún así le quedan secuelas de una cara llena de cicatrices, lo cual le generará rechazo social por los vecinos y los compañeros del colegio, los cuáles se burlan de él.
Su madre, Julia Roberts, que hace un papelazo en el trío estelar Owen Wilson (padre) junto al pequeño protagonista Jacob Tremlay (que lo borda), le muestra su amor más allá de las apariencias, valorando el corazón... algo que no todo el mundo sabe ver.
Nos encontramos también con el drama de la hermana, que quiere ser querida pero que no encuentra su espacio ya que sus padres están absorbidos en atender a su hermano pequeño... historias de amistad y desamistad... apariencias... y el cole visto desde los niños pequeños y mayores del instituto, planteando los problemas de cada edad.
ME GUSTÓ
pero tampoco es una peli que recomendaría a cualquiera, sólo a padres, profesores y niños que busquen solucionar problemas de bullying o descubrir el valor de una verdadera amistad
